Se pidió el cambio

Señores, esta semana Eder Alvarez Balanta entró en la historia. Seguramente de una forma que él nunca hubiera querido ni imaginado, pero lo hecho, hecho está, y por mas Back to the Future day que festejemos, tu hermano mayor siempre estará entero y con la misma cara de opa en todas las fotos familiares antiguas (?).

Pocos casos se nos vienen a la memoria en éste fútbol hiperprofesionalizado de jugadores que han pedido ser reemplazados por no querer continuar en el campo de juego. Nuestro Marcos J inconmensurable banco de datos nos ha refrescado los casos anteriores de Leandro Gioda, Esteban Saveljich, Nicolás Taglafico en España, algún otro comuñe por esa tierra y poco mas. Habrá que ver qué consecuencias le deparan a futuro al joven defensor colombiano, que a su favor cuenta, justamente, con su juventud para poder revertir este mal momento.

«There’s pineapple shrimp, lemon shrimp, coconut shrimp, pepper shrimp, shrimp soup…»

Pero no solo de hacer leña del árbol caído vive el hombre (?), tuvimos los cuatro partidos de vuelta por los cuartos de final de la Sudamericana y, a continuación, los reviviremos para ustedes como si hubieran estado frente al televisor en la cancha.

Huracán  0 (1) – Defensor Sporting  0 (0)

Luego de la victoria por 1 a 0 conseguida la semana pesada en Buenos Aires, el Globo visitaba en el Estadio Luis Franzini de Montevideo, con una gran cantidad de público visitante (entre 2500 y 3000 personas), a Defensor para intentar llegar a las semifinales de la Sudamericana, no olvidando también su posibilidad de clasificar a la Copa Libertadores del próximo año. Con las vueltas de Patricio Toranzo y Daniel Montenegro como únicos cambios, los de Eduardo Domínguez querían intentar mantener la POSESIÓN de la pelota el mayor tiempo posible para evitar los ataques del cuadro local, que repetía sus jugadores para la revancha.

En los primeros minutos el conjunto de Luis Tejera intentaba verticalizar la oferta de ataques, tratando de perder el menor tiempo posible en el mediocampo, buscando sus jugadores rápidamente a los delanteros Castro y Gómez. Vismara y Bogado, por momentos, permitían que les ganaran las espaldas y, de esa manera, a los 10 minutos, Defensor ya había tenido varias aproximaciones, pero ninguna de real peligro. A los 12 minutos la visita tuvo una chance clarísima, cuando Abila fue a buscar un pase profundo de Toranzo, y pudo evitar al arquero, pero, al quedarse sin ángulo sobre la línea de fondo, tocó atrás para la llegada de Montenegro, quien, con la única oposición de un defensor sobre la línea de gol, mandó la pelota afuera. A los 16′ fue Espinoza el que probó desde fuera del área, obligando al arquero Campaña a enviar el balón por sobre el travesaño. Contestaba el local con centros y ganando de arriba en el área. Una jugada personal de Cardacio le dio un tiro libre cerca de la medialuna del área, pero el remate de Lozano se estrelló en la barrera.

«Aníbal Fenández? Aníbal Fernández?? A quien se lo ocurre ponerlo de candidato a Aníbal Fernández??»

Hacia la mitad del primer tiempo, Defensor tenía arrinconado a su rival, pero ese dominio se diluía cerca de Marcos Díaz. Los de Parque Patricios solo podían cortar las jugadas con infracciones en sus últimos metros, teniendo como consecuencia a sus centrales amonestados. La visita no encontraba la pelota y, para cuando lograba recuperarla por un error del rival, la perdía casi inmediatamente. Recién a los 34 minutos volvió a merodear el área de enfrente el globo, cuando Wanchope giró dentro de la misma sobre la linea de fondo, y sacó un sorpresivo y potente remate que reventó el travesaño, mientras el arquero nada podía hacer. Ese último tramo de la etapa fue el mas tranquilo de Huracán, manteniendo al local lejos de Marcos Díaz, y pudiendo mantener el control del balón por varios pasajes del encuentro. Sin embargo Defensor tuvo la mas clara a los 42 minutos, cuando un centro casi frontal de Lozano encontró solo a Gómez, pero su cabezazo fue desviado hacia un costado magistralmente por el arquero.

El complemento comenzó como si el primer tiempo no hubiera terminado, con ambos conjuntos atacando dentro de sus posibilidades. El Globo parado algo mas de contra, salía rápido buscando a Espinoza quien, con su velocidad y gambeta, complicaba a sus marcadores. A los 51′ el equipo uruguayo casi pega justamente de contra, tras una pelota quieta desperdiciada por el visitante, Felipe Rodriguez se metió en el área tras superar con un caño a Nervo, pero quiso picársela a Díaz, y la pelota se fue lejos. Hacia la hora del partido era claramente mejor lo de Huracán, manejando la pelota con los toques precisos de Bogado, las corridas de Espinoza y Abila que obligaba siempre. Los montevideanos comenzaban a sentir el desgaste del esfuerzo constante sin conseguir resultados, y cada vez dependían mas de un arresto personal que del juego asociado que habían mostrado en momentos previos.

«Asi no, que me vas a llenar de barro el muslo!» (?)

El técnico Domínguez decidió el ingreso por Montenegro del verdadero jugador número 12 y 13 del plantel quemero, Moreno y Fabianesi, para darle algo mas de vida despliegue al mediocampo, y para ayudar a San Román sobre la derecha a controlar a Rodríguez que, a esa altura, era la única carta ofensiva de los orientales. Para los 70 minutos el ritmo del partido había mermado, entre la incapacidad del local por torcer la historia y la obvia conformidad de la visita por el empate que les permitía clasificar.

Luego de unos diez minutos sin demasiado para destacar, entraba Villarruel por Toranzo para sumar calor marca en el medio. El local iba hacia adelante, ya sin ideas, y de a poco se le iban presentando mas espacios para la contra a los de EL YERNO (?). Campaña evitó con su pecho el gol de Espinoza a los 81′. Al final Defensor solo podía acercarse con centros por arriba y, de un tiro de esquina, el arquero (lo mas destacado del equipo junto con Espinoza) contuvo, sin dar rebote, un cabezazo de Lozano. Sobre el tiempo cumplido, pareció que Díaz cometió penal al salir con sus pies sobre un atacante uruguayo, pero el árbitro, que fue bastante permisivo con el juego brusco en todo el partido, lo dejó pasar. Los minutos recuperados mostraban al local yendo por la heroica de cualquier manera posible, dejando campo para que Abila intentara solo llegar hasta el área de enfrente para definir la serie. Pero no hizo falta, llegó el final y tanto los jugadores como los hinchas quemeros presentes pudieron desatar el festejo.

«Mientras nosotros festejamos, que Moreno y Fabianesi queden (?) como supervisores de bolso naranja»

Huracán se metió entre los cuatro primeros en su primer participación en la Sudamericana. Apoyado en su solidez defensiva, principalmente por Marcos Díaz, un mediocampo sólido y un delantero en su mejor año, consiguió superar a un duro rival que no se entregó hasta el minuto final.Tiene ahora una prueba de fuego para ver si éste equipo tiene lo necesario para dar un salto de calidad, visitando primero al Monumental y luego recibiendo en el Ducó a un River Plate que viene tecleando pero que de todas maneras no deja de ser el campeón vigente de esta competición- Con la eliminación de Independiente ya tiene el Globo en su poder ta clasificación a la Copa Libertadores 2016, nuevamente en la etapa del repechaje que superara este mismo año.

Recién recibidos de la Escuela para Aspirantes a Tres Chiflados, vemos en acción a dos de los mejores promedios (?):

Chapecoense  2 (3) – River Plate  1 (4)

Con el único cambio de Ponzio por Lucho González, River viajaba primero a Florianópolis, pero no para ir reservando apartamento para febrero, sino para trasladarse luego a la cercana ciudad de Chapecó donde, en el estadio Arena Condá, se enfrentaría a este simple Chapecoense para concluir el trámite y llegar a semifinales. En un buen marco de público, los primeros minutos mostraron al visitante bien plantado sobre el campo rival, tratando de hacer circular el balón para evitar las marcas y hacer correr de mas a los del verdao. Avisó Pisculichi con un tiro libre a los seis minutos que pasó cerca del palo derecho del arco defendido por Danilo. La primera aproximación del local se dio poco antes de los diez minutos, con una entrada por la derecha del área de Maranhão, pero su remata fue controlado sin problemas por Barovero.

Hacia el primer cuarto de hora el trámite se había emparejado, con el local presionando mas arriba y tratando de llegar con pelota dominada cerca del área millonaria. Pero en cada recuperación y toque rápido de la visita se hacía notar la diferencia abismal de categoría entre un equipo y otro. A los 20 minutos, tras un gran desborde por la izquierda de Neném, su centro con rosca al segundo palo fue cabeceado por Bruno Rangel, y la pelota se desvió en Balanta, descolocando a Barovero, quien no pudo evitar la apertura del marcador. El gol en contra descolocó también al conjunto de Marcelo Gallardo, pasando unos minutos de zozobra que no pudieron ser aprovechados por el local para ampliar rápidamente la diferencia.

Balanta permitiendo el gol rival, toma 1

Sobre la media hora había vuelto a tener la iniciativa el equipo argentino, pero los brasileños seguían siendo mas punzantes en sus ataques como demostró Ananías a los 32 minutos, que rompió el adelantamiento de la defensa para irse solo frente a Barovero pero, ante el rápido retroceso de Balanta, terminó enredándose con la pelota y perdiendo la oportunidad, aunque, a primera vista, pareció que el colombiano cometía falta como último recurso, pero el árbitro, correctamente, no la cobró. Parecía haber una actitud mas de lucha y concentración por parte de los jugadores locales, mientras los visitantes a la distancia daban la sensación de sobrar en cierta medida el partido, quizás sabiéndose superiores técnicamente. Maranhão seguía complicando a Casco, mientras por el lado opuesto Mercado se veía superado constantemente por Neném y Ananías, siendo insuficiente la ayuda de Sánchez.

Volvió a llegar River recién sobre el final de la etapa con un remate de volea de Ponzio que Danilo desvió con esfuerzo al tiro de esquina. Y ya en tiempo recuperado y cuando apretaban sobre el área brasilera, Carlos Sánchez abrió a la derecha a Pisculichi quien metió de zurda un centro exacto al espacio entre el punto del penal y el área chica donde entró en carrera el uruguayo para ganarle a la salida del arquero y poner de cabeza el 1 a 1 que sicologicamente caía justo para quitarle confianza a los brasileños, quienes debían hacer ahora dos goles para forzar la definición por penales.

Sin embargo ese empate sobre el cierre del primer tiempo no mermó la actitud del conjunto de Guto Ferreira. Siguió yendo en búsqueda del arco rival y se vio recompensado a los 52 minutos. Un tiro libre desde el costado izquierdo fue enviado al segundo palo, donde Balanta nuevamente falló en la marcación permitiendo que cabeceen hacia el medio, para que Bruno Rangel se arroje un búsqueda de la pelota y marque así su segundo gol personal y de su equipo. Siguió yendo el local tras el gol, aprovechando la confusión y el bajo nivel de toda la defensa riverplatense. Casi enseguida se lo perdió Carlos Javier Neto abajo del arco tras un rebote de Barovero. El mediocampo argentino se veía superado, tanto Ponzio como Kranevitter debían correr detrás de la pelota y no podían cortar los pases verticales de los brasileños, quienes ganaban terreno por las bandes, buscando el desborde y el centro atrás. Gallardo notaba ésto y reemplazó al amonestado Ponzio por Tabaré Viudez. Enseguida Alvarez Balanta se ganó la tapa de éste post (?) pidiendo el cambio mientras acusaba una lesión menos creíble que los desmayos del marido de Adriana Aguirre, ingresando Mammana en su lugar. Dentro de un trámite algo encualquierado en esos minutos, casi Mora pone el empate pero Danilo le ganó y pudo desviar la pelota. Al Roly’s time minuto 69, Mercado cabeceó en el área pero la pelota se fue larga sobre el palo derecho.

Balanta permitiendo el gol rival, toma 2

El rigor físico iba haciendo mella en ambos conjuntos, perdiendo justeza en los pases. A los 75′ Barovero le sacó de manera excepcional un cabezazo de pique al suelo a Bruno Rangel, quien casi consigue su tercer gol del partido que hubiera empardado el marcador global. Enseguida el técnico argentino mandó a la cancha a Lucho González por Pisculichi para reforzar el mediocampo. Ananías desbordaba a Mercado mas que Del Caño si ganaba las elecciones (?) y llenaba de centros el área de River. Con el local jugado en ataque, Sánchez estuvo cerca de empatar a los 81′, pero no pudo llegar tras un centro cruzado al área.

Entre los cientos de envíos a las cercanías de Barovero, un cabezazo pegó en el travesaño sobre el tiempo cumplido. Barovero enseguida ganó un par de minutos de tranquilidad haciéndose el Orión lesionado. Frente a la desesperación del local en los últimos minutos, recién pudo el millonario volver a mantener la POSESIÓN para hacer correr el reloj. Entre cambios para demorar y lesiones fingidas, transcurrieron los últimos instantes hasta el final, donde los jugadores visitantes pudieron bajar los huevos de la garganta desahogarse por haber conseguido el objetivo de la clasificación.

«Yo te sigo a todas partes…»

Con una actuación espantosa de su defensa, dependiendo de las atajadas in extremis de su arquero, y teniendo suerte en varios momentos clave, River llega casi en piloto automático a las semifinales de la Sudamericana. Favorecido por un fixture que le permitió sortear un par de rondas frente a rivales claramente inferiores, se encuentra casi sin quererlo frente a la oportunidad de llegar a una nueva final continental. Pero, para ello, deberá mejorar ostensiblemente su nivel, si quiere superar a un Huracán que ha demostrado ser un conjunto serio y convencido de su juego. Mas allá de los guiños constantes de la diosa Fortuna, de todas maneras el equipo comandado por Marcelo Gallardo cuenta con jugadores capaces de inventar en cualquier momento una acción fuera de contexto para terminar definiendo los partidos, con Carlos Sánchez como máximo exponente de ello.

Lo que no pudo hacer durante el tempo que quiso jugar jugó, se acordó de hacérselo al techo del banco de suplentes…

Se iba calentando Alvarez Balanta en la salida pic.twitter.com/0gef4E5GFt

— Juan Pablo Camelo (@juanpcamelo) October 29, 2015

Que un equipo sin historia y que pelea el descenso en Brasil te pueda gastar, es imborrable…

Torcida da #Chapecoense grita "Segunda divisão!" para jogadores do #RiverPlate, no aeroporto, em Chapecó. #PlantãoEsportivo #LigaNaGuaíba

— Futebol Guaíba (@FutebolGuaiba) October 27, 2015

Santa Fe  1 (2) – Independiente  1 (1)

A los 2600 metros de la altura de Bogotá, Independiente visitaba El Campín esperando poder revertir el marcador de 0-1 con que terminó el primer encuentro en Avellaneda. Mauricio Pellegrino decidía los ingresos de Julián Vitale y Ezequiel Vidal por Juan Trejo y Martín Lucero, mandando al Cebolla Rodríguez a que esperara su turno dentro del banco de suplentes. ´Por su parte Gerardo Pelusso alineaba a los mismos once que habían obtenido la histórica victoria una semana atrás. El que no estaría ni siquiera entre los relevos sería Omar Pérez, quien durante la semana se resintió de su lesión que lo ha mantenido alejado de las canchas en el último tiempo.

Como se suponía, el rojo salió decidido a imponerse desde el mediocampo, para controlar así la pelota y poder construir desde su propia mitad las aproximaciones al área rival. El local prefería esperar agazapado, buscando el pase largo a sus interesantes delanteros tras cada balón recuperado. Dentro de esa mayor preponderancia, Benítez probó con un remate a los cinco minutos que se fue desviado. La respuesta fue un disparo del venezolano Seijas saliendo de un tiro libre que se fue por encima del travesaño del arco de Sciolito Rodríguez. El partido se equilibró hacia los diez minutos, con los medios locales pudiendo hacer pie en esa zona crucial para disputar el control de la pelota y evitando también que tanto Benítez como Mancuello reciban cómodos.

El partido se jugaba lejos de las área, con la visita reclinando el juego sobre su izquierda con el tandem Tagliafico-Benítez, pero frente a una defensa escalonada terminaba el volante intentando la gambeta y perdiendo. Robinson Zapata a esa altura estaba mas aislado que Crusoe (?). No se mostraba mucho mejor el local, que recién a los 22′ pudo acercarse al área rival, con un remate desde fuera del área de Quiñones que fue controlado increíblemente sin problemas por el arquero. Cuando no pasaba nada, un tiro de esquina mas que cayó al segundo palo, encontró la llegada libre de Francisco Meza para elevarse y con un cabezazo al palo de donde venía la pelota dejó parado al ruso y estableció la apertura del marcador.

Este tanto en contra no modificaba demasiado la ecuación para Independiente, toda vez que marcando los mismos dos goles que antes inclinaría la balanza a su favor. El problema para el conjunto argentino es que no encontraba el camino para acercarse al arco de enfrente. A diferencia de lo ocurrido siete días atrás, lo del visitante era flojo de por si, incapaz de armar algún circuito de juego que le permita avanzar con la pelota en su poder para generar llegadas francas sobre el arco bogotano. En una cancha rápida y con la pelota globalizada, los de Avellaneda se equivocaban al buscar con pases largos o profundos cuando se imponía el toque corto y al compañero mas cercano. Probó Pellegrino con un cambio posicional, intercambiando de puntas a Vidal y Benítez, pero con resultado sexual intrascendente. Llegó el final del primer tiempo, con mucho para mejorar si la visita quería que los próximos 45 minutos no fueran los últimos en esta edición.

Con el ingreso mas que esperable de Cebolla Rodríguez por VIdal, comenzó el complemento. Antes del minuto tuvo la chance de empatar la visita, cuando el ex jugador de Atlético de Madrid tocó dentro del área para su compatriota Vera, quien fue bloqueado cuando ya se disponía a definir. Parecía tener otra actitud el cuadro argentino, lo que obligaba a replegarse y juntar sus líneas a los colombianos, dejando a su dupla ofensiva para intentar alguna contra. Por esa vía casi consigue el segundo gol, cuando tras una corrida de Quiñones por izquierda, Seijas remató al pecho de Rodriguez quien salió rápido a achicar. A los 56 fue Benítez el que buscó el ángulo superior derecho del arco de Zapara, sin suerte. Enseguida fue Toledo el que remató totalmente desviado. Sin lucir, ya era muy superior lo del rojo a lo brindado en los primeros 45 minutos, aunque la seguía sin alcanzarle para ponerse nuevamente en partido.

Pasada la hora de juego, se intercambiaban ataque por ataque o sea ataque al cuadrado, pero el local por la obvia superioridad numérica que lograba generar en cada contra parecía estar mas cerca del segundo tanto que Independiente del empate. Entró Martín Lucero por un golpeado Tagliafico. Y a menos de un minuto de ingresar, casi el ex jugador de Defensa logra definir tras un centro de Mancuello, pero tras pararla de pecho dentro del área la pelota se le fue un poco larga permitiendo la cobertura del Balanta que juega los 90 minutos (?). En el fondo quedaban Cuesta y Pellerano mano a manos contra Quiñones y Morelo, con el riesgo asumido para mantener mas gente en ataque.

Seguía siendo Lucero lo mas peligroso en el ataque argentino, pero pese a contar con un par de ocasiones no podía lograr la igualdad. Los minutos iban pasando para desesperación de Pellegrino (que se fue expulsado por insultar al cuarto árbitro)  y los suyos, mientras que del lado de enfrente buscaban perder algo de tiempo y enfriar así el partido. Ya al final se mostraban los de Avellaneda resignados y cansados por el esfuerzo físico de jugar en la altura. Cuando parecía todo terminado, Rodríguez recibió en el área y la punteó a la base del palo, y del rebote se hizo un nudo un defensor en su afán por rechazarla y Zapata no pudo evitar que ingresara la pelota a su valla. Quedando un minuto y medio, y gastando caso un minuto en reanudar, el árbitro se equivocó en no agregar mas tiempo al ya recuperado. De todas maneras, por los 179 minutos anteriores fue merecido el triunfo global de Santa Fe.

Independiente se despide de la Sudamericana con la sensación amarga agridulce de que podría haber hecho algo mas para permanecer en la misma. Siempre se dirá que los que quedan afuera son mejores que los de adentro, sino que lo diga Randazzo (?), pero pareciera que las ausencias de Méndez (especialmente) y Albertengo fueron fundamentales en un plantel bastante corto en jerarquía. Perdiendo la posibilidad de llegar a la Libertadores por esta vía, ahora deberán apuntar todos sus cañones a conquistar la liguilla para no terminar el año sin haber conseguido al menos uno de los objetivos de mínima propuestos al principio del semestre.

Sportivo Luqueño  2 (2) – Atlético Paranaense  0 (1)

Frente a unos enfervorizados CHANCHOLIGANS, Luqueño supo como jugar el primer tiempo para marcar dos goles y así dar vuelta la serie tras el 0-1 de Brasil. Por supuesto que todo se simplificó para el local por el GO-LA-ZO convertido por Jorge Ortega Salinas cuando recién se jugaban tres minutos. Siguió creando oportunidades el equipo dirigido por Eduardo Rivera frente a un superado Paranaense, por lo que no sorprendió a nadie que a los 33 minutos y tras una falta dentro del área, José Leguizamón se hiciera cargo de ejecutar el penal y de marcar el gol tras el rebota dado por el arquero Weverton. Por mas que en la etapa complementaria intentó el conjunto brasileño llegar al descuento que le permitiría clasificar por el gol de visitante, ni Walter ni ninguno de sus compañeros lo logró. Así Sportivo Luqueño se mete entre los cuatro mejores, donde recibirá primero a Santa Fe buscando su lugar en lo que sería una histórica final para éste popular equipo paraguayo.

Ni Sciolistas, ni Macristas… CHANCHOLIGANISTAS