Hacia el abismo

¿Querían escritoriazos? En Europa también pasa. Un equipo que se ganó su derecho a seguir en primera dentro de la cancha es mandado a segunda división gracias a la mala praxis económica de sus dirigentes.

En una pequeña ciudad del país Vasco, encerrada entre las montañas, un pequeño pero sólido club se erige y se mantiene, pese a todo, en la primera división española. Estamos hablando de la SD Eibar, un club modesto que llegó a la LFP a pesar de contar con un respaldo de 27500 personas. Bastante mas que Lanus o Banfield, si. Pero esa no es la capacidad del estadio sino la población de la ciudad, dedicada a fabricacion de máquinas de coser o escopetas, de ahí el apodo de “armeros”.

El coqueto estadio Ipurúa al pie de las montañas

Fundado en 1940 bajo los colores del Barcelona, este pequeño pero encomiable conjunto ha hecho a lo largo de su historia del mariogomecismo a ultranza no solamente un culto, sino toda una forma de supervivencia. Se ha hecho patente su juego rácano de meterse todos atrás y tirar pelotazos al 9, por una razón muy lógica: desde siempre los jugadores del Eibar llegaban de trabajar y tenían poco tiempo para entrenar. Sin embargo, no le ha ido mal. Solo 4 años duró en los torneos regionales, y todo su desarrollo se ha dado en tercera o segunda división. De hecho, es el equipo que mas ha estado en Segunda en la historia, contabilizando en total 25 años. Desde 1988 se mantuvo casi ininterrumpidamente y eso le permitió cruzarse con los grandes en la Copa del Rey. Pero siempre, manteniendo su austeridad y haciendo del lema “no gastar mas de lo que se tiene” un sello. Algo que debería ser lo obvio y lo básico, pero que casi ninguna entidad deportiva lo realiza, por lo que pasó a ser mas una cuestión ética que económica en si. El contraste es amplio con equipos como Valencia, Espanyol o Atlético cuyas deudas en euros llegan a las 9 cifras.

Pero la diferencia no solo la marca desde su plantilla. Conforme a su ética de ser un club de futbol antes que una empresa, mantiene a precio accesible las entradas, lo cual es toda una contracultura dentro de un futbol dominado por la dictadura de la televisión, que obliga a los equipos a jugar en horarios inverosímiles como las diez de la noche, y poniendo las entradas mas caras de toda Europa, apartando a los aficionados de los estadios. Bueno, nada que en Argentina no conozcamos.

Al contratar casi el 80% de su plantel bajo el salario mínimo, no han sido pocas las dificultades del Eibar. Las cada vez mas rigurosas leyes económicas de la LFP, lo fueron acorralando y en 2014 debió salir a vender acciones para poder apliar su “capital social” (el cual debe ascender al 25% de los presupuestos promedio en Primera y en Segunda, un despropósito para un club que no debe dinero) y evitar el descenso a Segunda B. Pero a pesar de todo y con su firme intención de seguir siendo una entidad deportiva que pertenezca a los socios y no a un jeque árabe, logró el ascenso y jugó toda esta temporada en primera división.

Los resultados fueron naturalmente dispares en su primera aparición histórica en la liga de la desigualdad. Con 35 puntos en 38 partidos, el puesto 18 los condenó al descenso. Tras una primera rueda de ensueño donde cosechó 27 puntos y mostró mucho tesón y complicaciones para todos los rivales que visitaran Ipurúa, un campo un tanto angosto, bastante parecido al de Olimpo de Bahia Blanca. Pero tras la venta de Albentosa, su puntal en la defensa, Albentosa, todo se derrumbó en la segunda parte de la temporada, ya que el club no contó con el dinero suficiente para reemplazarlo, y las derrotas comenzaron a caer una a una, haciendole larguísima y angustiosa la estadía en la división TOP al conjunto rojiazul.

Sin embargo con la temporada terminada el sol volvió a salir para los vascos… y se oscureció el horizonte en Alicante. Como si fuera una lección al mejor estilo hollywood, el equipo que siempre hace las cosas bien y tiene sus cuentas al día pasó de la noche a la mañana de estar descendido a salvarse, a costa del Elche, quien no tuvo el dinero para pagar sus impuestos, mas precisamente a Hacienda, y tomará el lugar del equipo armero entre los tres equipos que descienden. Es la primera vez que esto sucede con un equipo de primera división por estos motivos (ya había ocurrido por delitos de corrupción, por ejemplo).

El equipo verdiblanco había logrado su mejor campaña desde la temporada 76-77 y con 41 puntos es la cosecha mas prolífica de toda su historia en la primera división. Pero sin embargo la derrota en el campeonato económico lo manda a la segunda.

¿Por qué sucede esto?

En primer lugar, no son pocos los clubes chicos con problemas financieros. Sporting de Gijon por ejemplo. logró el ascenso a primera división el año que viene pero no podrá incorporar jugadores por no poder afrontar con sus deudas mas urgentes (un millón de euros a sus jugadores, que deberían haber cobrado el último 31 de Diciembre). Pero el tema se torna injusto cuando hay clubes como Valencia o Atlético Madrid con deudas astronómicas, que sin embargo gracias a compradores asiáticos multimillonarios pueden contar con la liquidez necesaria.

 

Si bien se viene un nuevo reparto televisivo un poco mas acorde, esto a largo plazo será insuficiente para que los clubes chicos saneen sus deudas en una liga con estadios vacíos por un lado y grandes estrellas por el otro, la liga de la desigualdad.

Por otro lado, hay que decir que Elche ya sabía de sus dificultades y la LFP también estaba anoticiada de los 6,5 millones de euros de desfasaje (?) y le habían advertido a principio de temporada que se adhiera al límite presupuestario que implica la ley del deporte española, el mismo que se le ha impuesto al Gijon por estos días y que no solo contempla un máximo salarial sino también puede llegar hasta a una reducción del 12% de los salarios del plantel a fin de volver a equilibrar las cuentas. Además ya en noviembre de 2014 apareció un informe en el que se detalla la existencia de documentación destruida antes que se pudiera contrastar (!) y el 31 de Marzo se conocieron los resultados de una auditoría que empresas extranjeras hicieron sobre cada club de la Liga, en las que las cuentas del Elche volvían a aparecer en rojo.

Obviamente los franjiverdes no recibieron esta noticia de brazos cruzados. El club alicantino cambió de Directiva, al tiempo que la nueva llevó la lucha al Tribunal Administrativo del Deporte quien por estos días deberá sancionar quien se queda en primera y quien desciende. Si bien la comisión saliente liderada por José Sepulcre ocultaba los resultados de su actividad económica, la nueva junta mandó un pagaré a la LFP de mas de 3 millones y medio de euros a cobrar en 60 días y avales para el pago del resto que se efectuarán a futuro, práctica usual en todos los clubes de primera españoles, cabe aclarar. Además a esto se le suman otras dos denuncias en la justicia ordinaria contra la LFP por parte de varios jugadores del plantel que naturalmente se ven afectados laboralmente por esta decisión.

Y aunque ud. no lo crea, detras de una S.A.D. hay gente también, que es sin duda alguna el mayor respaldo de una institución mas allá de los ceros que sigan a una coma escritos en un papel. Los hinchas del verdiblanco agrupados en la Plataforma Salvemos al Elche se han manifestado contra esta decisión arbitraria de la liga según ellos y preparan una nueva movilización para el 2 de julio. Además, han iniciado una demanda contra José Sepulcre y sus cómplices por estafa, delito contra la hacienda pública y blanqueo de capitales entre otros crímenes. Además estudian la manera de demandarlo por incluir la venta de dos acciones del club a cada socio que compró su abono de la pasada temporada, so pretexto que ese dinero saldaría las cuentas del club pero que nunca mas vió la luz.

En conclusión, mientras Elche prepara su pretemporada con números y un plantel de segunda división (al que se le fué también su entrenador Juan Escribá, de los mas ganadores de la historia del club con un ascenso y dos temporadas en la A en tres años) pero que también pueda jugar en primera, Eibar debe esperar el fallo preparándose para una temporada en primera, pero que puede ser en la segunda división si la avanzada de Elche en los tribunales prospera.

Resulta hilarante ver como en una misma historia de expedientes judiciales confluyen situaciones disímiles entre un equipo que hizo las cosas bien económicamente a lo largo de su história y otro que las hizo mejor deportivamente pero cuyas cuentas están en rojo es multado y sancionado por una liga que trata mucho mejor a quienes tienen magnates detrás, y lo envía a una divisional donde los ingresos son inferiores, agravando el problema que supuestamente pretenden solucionar y ademas encima ahora enfrentando entre sí a ambas instituciones en una disputa judicial.